Sudoración y menopausia

Es un cambio que le ocurre a casi la mitad de nuestra población, pero la información es limitada y los consejos aún más. Hoy hablaremos de la menopausia y los sudores que la acompañan, es decir, los sofocos y los sudores nocturnos.

¿Qué es la menopausia y la perimenopausia?

En pocas palabras, la menopausia marca oficialmente el final de la reproducción femenina. Sin embargo, esto no es más que la punta del iceberg. La menopausia se refiere al periodo en el que se deja de menstruar. Perimenopausia significa "alrededor de la menopausia". Los cambios hormonales pueden empezar a producirse 8-10 años antes de la menopausia, y la perimenopausia se refiere al momento en que comienzan los síntomas de la menopausia, incluidos los temidos sofocos y sudores nocturnos.

Sudoración, sofocos y sudores nocturnos

Se calcula que más de dos tercios de las mujeres experimentan sofocos cuando se acercan a la menopausia. A pesar de ello, nunca se ha demostrado científicamente por qué se producen. Los vasos sanguíneos cercanos a la superficie de la piel empiezan a dilatarse para refrescarse, lo que hace que empiece a sudar. Esto puede ir acompañado de aceleración del ritmo cardíaco, sensación de ansiedad y, a veces, pérdida de concentración. Cuando esto ocurre por la noche, se habla de sudores nocturnos, que pueden dificultar enormemente el sueño. Por término medio, un sofoco puede durar unos cuatro minutos. Pueden ocurrir un par de veces por semana o hasta una vez por hora.

El sudor y el olor

Muchas personas menopáusicas dicen sentirse muy acomplejadas por el exceso de sudoración que provocan los sofocos, sobre todo porque pueden aparecer en cualquier momento. La mala noticia es que, desgraciadamente, por el momento no hay forma de evitarlos. no hay forma de evitarlos.. Como ocurre con todos los sudores, puede ser muy difícil evitar que se produzcan, la clave está en combatir el olor.

Ya hemos hablado en otras ocasiones de que los desodorantes no evitan la sudoración: sólo los antitranspirantes pueden hacerlo y, personalmente, no somos muy partidarios de ellos, ya que impiden que el cuerpo haga sus funciones naturales y se han relacionado con algunas enfermedades desagradables. Por lo tanto, muchas personas están recurriendo a los desodorantes naturales para ayudarles.

Un desodorante para la menopausia

La función de un desodorante es mantenerte fresca durante todo el día. El desodorante natural Fussy's lo hace de varias maneras, principalmente impidiendo que las bacterias malolientes se acumulen en lugares cálidos como las axilas y absorbiendo parte de la humedad. Puedes leer más sobre la ciencia que hay detrás de Fussy aquí.

Todo esto significa que, cuando se produzcan esos sofocos de sudor, puedes sentirte segura sabiendo que tu sudor no huele. Lo hemos probado científicamente, y se ha demostrado que Fussy dura 24 horas, pero incluso si crees que necesitas más pasadas, o si te estás lavando las axilas a mediodía después de un sofoco, el estuche elegante y estilizado de Fussy te permite meter el desodorante en el bolso y añadir más pasadas cuando lo necesites.

Romper el tabú

Uno de los principales problemas a los que se enfrentan quienes sufren sofocos y sudores nocturnos es la falta de conversación. A pesar de estar presente en una proporción tan elevada de la población, la menopausia sigue siendo un tema poco investigado y muy ignorado por la sociedad, lo que dificulta la búsqueda de recursos y recomendaciones.

En Fussy, nos encanta la gente que suda y nos encanta hablar del sudor: todos lo hacemos, ¡y no hay nada vergonzoso en ello! Así que haznos saber cualquier pregunta que tengas y haremos todo lo posible por responderte.